Voluntad,
viento,
tiempo que ondea, mide
y corta el frío, a rayas mis labios.
Borra y rompe,
discordia, enferma y adormece.
Roen los ratones los huesos de este corazón,
tardío camino de invierno.
Quedará alguna historia para contar,
siempre queda pluma en la despensa,
y de ella hurtarán provecho y placer,
voluntad, viento y tiempo que acontece.
3 comentarios:
Voluntad y tiempo. Dos ingredientes necesarios para superar la melancolía que en otoño nos llega con el viento.
Me gustó.
Besos
Mirada contemplativa de otoño, ante la que pasa la vida y el viento que dibuja rayas en los labios.
La melancolía siempre es buen material para la pluma que hay en la despensa.
Buenas imágenes.
Un abrazo
Siempre queda una historia que contar y espero que pase la melancolía y aún sigas contándonos historias.
Saludos.
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