
Ahí está la sombra que me aterra,
la música que me despierta.
Ese es el ruido que se levanta frío y cortante,
vertical, hasta la médula.
Entra,
la puerta está abierta...
No es sueño torbellino de emoción,
es Muerte que acompaña.
Es sombra de colores y ropajes diarios,
de cabellos despeinados por el aire agitado.
Fotografía de María Emilia Jacobacci
6 comentarios:
Dios mío, José LUis, a veces, cuando entro en tu página me siento la más tonta del mundo. No tengo más remedio que quitarme el sombrero ante tu capacidad de creación y tu mundo interior, a veces indescifrable para mí. Pero me atrae sin remedio.
Un abrazo
La muerte con mayúsculas entre sombras que resultan misteriosas... Como Carlota, creo que posees un mundo interior tan amplio como el mar. Enhorabuena por mostrar lo que muestras.
Besos.
La Muerte, esa con mayúsculas, la amante eterna, la seductora sin tapujos, la perenne, la infalible, la certera...
Es uno de los grandes temas pendientes en la esencia del alma.
la sombra de la muerte, es anhelo de instantes perdidos...
genial, ufff
un saludo
Tu poema sobrecoge, es sutil e insinuoso.
Si lo comparase a un animal diría que es una serpiente que se arrastra hacia nosotros amenazándonos con su mortal veneno.
....
La verdad que me gusto mucho el poema y si mi fotografia fue la fuente de inspiracion me pone muy contenta de que haya servido para realizar este poema.
Me sorprendi mucho al ver mi fotografia en tu blog.
Te dejo mi espacio de messenger para despues poder ponernos en contacto y quizá pueda mostrarte mas de las fotografias que hice pero q todavia me faltan escanear.
Muchas gracias.
Publicar un comentario