martes, 15 de enero de 2008

ESCRIBO QUE HOY...


Escribo que hoy me acompaña un recuerdo,

y un deseo que como entonces va de su mano.

Era que me tocaba, y que en mí

mi pupila de luna llena se fundía con el cielo.


Lo recuerdo. Ahora mismo lo noto:

aquel piloto accidentado, tal vez...

Pero ni siquiera mamá paraba la carrera,

y todo seguía hacia delante, sin más.


Nadie;

¿por qué no paraban la carrera y lo curaban?

Pero imposible detener el curso de los hechos,

el viento victorioso que agita la bandera a cuadros.


Y de aquello han pasado ya muchos días,

tal vez demasiados,

y al contrario de mí el viento no envejece,

agita enardecido banderas y predecibles gratos días.

3 comentarios:

fotosbrujas dijo...

¿Fue real?
saludos brujos

Maria Coca dijo...

El tiempo personal y climático se unen para darle forma a un bello recuerdo. Seguro que ambos tiempos seguirán confabulándose para ofrecerte nuevos momentos repletos de luz.

Besos desde mi orilla.

Sirena Varada dijo...

Pocas cosas como los recuerdos de un niño... Lo que fue incomprensible se hace indeleble.
¡Precioso poema!